Cursillos de Cristiandad > Reseña histórica > I. Génesis del Movimiento de Cursillos
3. El MCC no nació por generación espontánea. Para comprender su historia y captar su espíritu, tenemos que retroceder en la máquina del tiempo y situarnos en el marco histórico de la España de los años 30. Uds recordarán la terrible guerra que trastornó a este país durante los años 1936 hasta 1939. No es momento de extendernos sobre los episodios atroces de esta guerra fratricida. Recordemos solamente que la República había sido instaurada en el 1931, aboliendo la monarquía y dando nacimiento a una revolución comunista alimentada por la Unión Soviética. Cinco años después, el general Franco, apoyando la monarquía, y con ayuda de fuerzas fascistas internacionales, se subleva y se enfrenta a las fuerzas fieles a la República. Se sabe que las fuerzas de Franco ganaron, pero dejaron un país totalmente arruinado y una hecatombe de medio millón de muertos.
4. Ahora bien; el régimen instaurado por Franco reconocía a la Iglesia católica un poder difícilmente imaginable. Y el comportamiento de la gente de la Iglesia, en España, durante estos años, ha sido muy diferente según se tratara de las regiones donde el catolicismo había sufrido persecuciones de parte del anticlericalismo de la zona republicana (que se llamaba la zona roja) o bien si se trataba de los residentes de la España llamada nacional, bajo el régimen de Franco. La isla de Mallorca, donde nacerá el Cursillo, pertenecía a esta última. Ahí donde la Iglesia había sido perseguida (en la mayor parte del país), el recuerdo todavía vivo de los «mártires de la cruzada» — Juan Pablo II beatificó a varios — inspiraba un estilo épico, reivindicador, hasta agresivo, en los comportamientos de los católicos de la post-guerra. En Mallorca, al contrario, como en otras zonas donde los católicos no sólo no habían sido perseguidos sino que habían colaborado en la persecusión de los rojos, tenían casi vergüenza de ejercer su poder, ya que el prestigio social de la religión era nulo. Y las familias tradicionalmente católicas de Mallorca mantenían, concientemente o no, este aislamiento.